- Es un auténtico y descarado intento de “ golpe de estado”.
- El artículo 104 de la Constitución Política de Colombia es claro y categórico: para que el Presidente de la República convoque una consulta popular, se requiere concepto previo y favorable del Senado.
- Destinar 750.000 millones de pesos del erario a una consulta espuria, en medio del peor déficit fiscal de la historia reciente del país, constituye un acto de profunda irresponsabilidad.
- Este es un intento descarado de deslegitimar al Congreso de la República, órgano que representa la soberanía popular y cuya función constitucional se quiere desconocer.
- FENALCO hace un llamado firme y sereno a todas las instituciones del Estado para que asuman su papel histórico en defensa de la Constitución, la legalidad y el orden democrático.
Una vez más, el país asiste con preocupación a un nuevo intento del Gobierno Nacional por desviar la atención de sus reiterados fracasos mediante decisiones improvisadas y anuncios escandalosos, así lo afirmó Jaime Alberto Cabal, presidente de FENALCO, ante el nuncio del Presidente Gustavo Petro de convocar la consulta popular vía decreto. “A falta de resultados, se recurre al espectáculo. A falta de gobernabilidad, se arremete contra la institucionalidad”.
La consulta por decreto sin cumplir con los requisitos constitucionales, no solo es irresponsable, sino abiertamente ilegal. El artículo 104 de la Constitución Política de Colombia es claro y categórico: para que el Presidente de la República convoque una consulta popular, se requiere concepto previo y favorable del Senado. No hay lugar a interpretaciones.
Cualquier intento de eludir esta exigencia viola de forma flagrante no solo ese artículo, sino el principio democrático de separación de poderes.
El vocero de los comerciantes agregó que destinar 750.000 millones de pesos del erario a una consulta espuria, en medio del peor déficit fiscal de la historia reciente del país, constituye un acto de profunda irresponsabilidad. Más grave aún, revela una intención preocupante de adelantar la campaña de 2026, bajo la fachada de una consulta populista, debilitando la institucionalidad y poniendo en riesgo la democracia. Un auténtico y descarado intento de “ golpe de estado”.
“Esta acción deslegitima al Congreso de la República, órgano que representa la soberanía popular y cuya función constitucional se quiere desconocer. Lo que hoy vivimos es, sin exageración, un intento de ruptura del orden constitucional, un golpe a la democracia”, dijo el dirigente gremial.
“Expresamos nuestra solidaridad con el Congreso de la República y hacemos un llamado firme y sereno a todas las instituciones del Estado para que asuman su papel histórico en defensa de la Constitución, la legalidad y el orden democrático”, concluyó Cabal Sanclemente.